Transformamos la antigua dependencia del «masover» de una masía rústica en La Costa Brava en una vivienda adosada de 105 m², funcional y fiel a la esencia catalana. Conservamos la volta catalana y las vigas originales, pintándolas en un tono verde campiña que conecta con la carpintería restaurada.
Rediseñamos el espacio central para integrar salón, comedor y cocina, manteniendo el carácter de las masías tradicionales. Mezclamos yeso, mampostería vista y papel vinílico floral en las paredes, combinando suelos de parquet con baldosas de estilo hidráulico.
La cocina rústica de madera incluye electrodomésticos integrados, y reutilizamos elementos originales, como una puerta de establo restaurada. Iluminación LED y mobiliario rústico-moderno aportan calidez y continuidad visual con la masía principal.
Un espacio renovado que equilibra funcionalidad y tradición, en pleno corazón del Empordà.