Este proyecto transformó por completo una vivienda de 150m2 en Sant Gervasi-Galvany, Barcelona, convirtiéndola de clásica a moderna y diáfana. Las puertas correderas de gran anchura maximizaron el espacio, integrando con fluidez el recibidor, la cocina, el comedor y la sala de estar. La elección de tonos suaves y la demolición de tabiques proporcionaron una sensación de amplitud y sirvieron como lienzo para nuevas instalaciones de aire acondicionado, calefacción y fontanería. Detalles cuidados, como hornacinas estratégicas y mobiliario diseñado a medida, fusionaron armoniosamente con cada rincón. Las ventanas de aluminio, aisladas del ruido, y detalles únicos, como colgadores exclusivos, contribuyeron a un resultado espectacular, logrando una fusión serena de modernidad y amplitud.